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Miranda del Castañar – Muralla

Miranda del Castañar

2003

La Villa de Miranda del Castañar tiene protegido su casco antiguo como Conjunto de Interés Histórico Artístico. Este conjunto se ve delimitado por la muralla que lo circunvala y que se conserva casi en su totalidad. La Muralla es una gran mole de granito con forma más o menos oval, con un espesor que oscila entre los 2,00 y los 3,00 metros, una altura media de 7,00 a 10,00 metros y un perímetro de 631 metros, que se adapta a la topografía del terreno. No se conserva perfecta ya que falta toda la zona almenada, en algunas partes ha perdido altura y en su interior aparecen muchas viviendas adosadas al paramento. El acceso a la población se realiza a través de cuatro puertas practicadas en el muro, que se abren a las principales vías de comunicación en el interior, pasando todas por la plaza de la Iglesia, que fue el centro de la Villa.

 

Como consecuencia de la composición interna de la muralla y de la falta de protección de las zonas superiores, se ha originado una serie de desperfectos en la misma que se describen a continuación:

– Humedades. El filtrado del agua de lluvia desde las capas superiores provoca que las capas internas retengan el agua y se hinchen, dando lugar a reventones en los muros exteriores y el consiguiente peligro de desmoronamiento.

– Vegetaciones. La humedad procedente del interior, unida al clima propicio de la zona, favorece el crecimiento de especies vegetales. En varios puntos se han desarrollado especies arbóreas que deshacen literalmente los muros exteriores.

– Desprendimientos. Manifestados en las hiladas superiores de casi todas las zonas donde la muralla todavía queda libre en coronación, es decir, sin edificaciones.

– Elementos adosados. La comodidad y dejadez ha permitido que se utilice la muralla como soporte para el cableado eléctrico y de las bajantes de las viviendas con el consiguiente riesgo que ello conlleva para la integridad de la cerca.

 

A continuación, se describen las obras que se realizan para resolver estas patologías de la muralla:

–  Retirada de vegetación adosada a los muros, con especial atención a las higueras. Para ello, y donde sea factible, se procederá a desmontar el muro exterior alrededor de la higuera hasta que sea posible la extracción de las mismas de raíz. Se numerarán las piezas desmontadas y se repondrán las mismas de forma similar a la original. Donde no sea posible el desmontaje del muro se cortarán los tocones y se inyectará la solución necesaria para que el árbol no vuelva a reproducirse.

–  Limpieza general de elementos vegetales del muro con empleo de herbicidas, limpieza de la mampostería de otros elementos no deseables y reposición de piedra con procedimientos tradicionales, es decir, acuñado con piedra pequeña pero sin rejuntar con mortero. Para la limpieza general del muro se utilizará chorro de agua a muy baja presión, casi un lavado, respetando la pátina, muchas veces conveniente.

– Formación de una solera impermeabilizada de 6 cm de hormigón en las zonas superiores de las cuatro puertas de acceso a la Villa, y una canalización de las aguas pluviales que se recojan, para su evacuación a la red general. En el resto de la muralla y en su parte superior se evitará colocar esa solera de hormigón y se dispondrá otra a partir de arcillas para evitar que las aguas pluviales se filtren hacia el interior del muro. La coronación de dicha cerca se rematará con pavimento de losas de granito.

– Retirada de las barandillas y elementos añadidos en la coronación de la muralla y construcción de un peto de granito similar al aparejo existente, que remate la parte superior.

– Reconstrucción del adarve en la Puerta de la Villa y zonas adyacentes, formando un recorrido visitable. Para ello se reconstruirá la escalera de acceso al paseo de ronda recuperando en la medida de lo posible los peldaños de granito actualmente visibles.

– Retirada y soterramiento del cableado eléctrico adosado a la cerca. Retirada de los elementos de iluminación existentes y sustitución por otros dispuestos al otro lado de la ronda extramuros, que realcen la muralla, aunque, se cuidará y estudiará los elementos de iluminación para que casi sea una iluminación urbana.

– Picado de los rejuntados postizos y reposición con criterios arqueológicos, diferenciando las diferentes etapas constructivas.

– Empotramiento de bajantes de aguas fecales, que se renovarán y se comunicarán con nuevas arquetas y evacuación de agua de lluvia mediante gárgolas de granito, suprimiéndose las bajantes que actualmente ejercen este fin.